El envejecimiento de los gatos es, desgraciadamente inevitable, aunque la esperanza de vida cada vez es mayor. Por ello, debemos hacer todo lo que esté en nuestra mano para acompañarle y facilitarle la vida, con cuidados especiales para nuestro gato mayor.

Se considera que un gato es mayor, cuando cumple 10 años, más o menos. Eso sería en una persona entre 55 y 60 años.

A partir de esa edad, debemos observar el comportamiento y su conducta, para detectar algunos signos que puedan indicarnos que nuestro gato se está haciendo viejecito:
.- Disminución de la energía y menos ganas de jugar y correr.
.- Aumento del tiempo de sueño
.- Pérdida de apetito y sed
.- Comienzan a hacer sus necesidades fuera del arenero.
.- Pérdida del brillo y vitalidad del pelo.
Ante estos signos, es conveniente proporcionarle lugares de descanso accesibles y tranquilos. Conforme nuestra mascota se hace mayor va soportando menos las situaciones que le puedan provocar estrés y buscan mucho más los lugares tranquilos.
Podremos observar que huyen de los niños, otras mascotas o incluso de nosotros mismos y es recomendable facilitarles el acceso a las superficies altas, que tanto les gustan, mediante escalones para evitar que tengan que saltar.
Es muy importante aumentarle el consumo de comida húmeda ya que, al disminuir su sensación de sed, hay que propiciar su hidratación.
No olvidemos cepillarles con mayor frecuencia para que no empeore su pelaje.
¡¡Facilitemos la vida de nuestros gatos mayores!!
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